¿Te sientes mal por algo que ha ocurrido? Aprende a reflexionar.

Esto es común. 

No te culpabilices y enfócate en la solución. 

Aprender a reflexionar, te ayudará a obtener lecciones. Esas lecciones te ayudan a mejorar de verdad y te reconfortan.

Pongamos un ejemplo de situación.

Vas a un restaurante, pensabas que ibas a gastarte 50€.

Pero al final, el gasto es de 250€.

Debes entender el problema real.

El problema no es el gasto de 200€. 

El problema es no recibir un valor mayor en retorno. 

Grilled striploin sliced steak on cutting board over stone table

Ejemplo: si inviertes 200€, esos 200€ desaparecen de tu cuenta, pero vuelven al final del día como 220€ porque ha sido una inversión exitosa. 

Eso te hace sentir muy bien. 

Si vas a la cena, y en vez de gastarte 50€, te gastas 250€ pero la persona con la que cenas te da un negocio que vale mas que esos 200€, tu inversión vuelve en el mismo día y encima es positiva. 

Si te sientes mal, es un indicador de que NO has rentabilizado la operación. 

Debes estar atento a las lecciones de tus experiencias

Esta es la primera Lección: tu cuerpo te avisa si has tomado una buena decisión o no. 

Ahora vamos a usar un análisis de sentimiento. 

Siento que tengas que esforzarte y pensar, es lo que toca si quieres sentirte mejor, y tener mejores resultados.

En el ejemplo de la cena, el análisis de sentimiento seria algo así:

– decir que te ha gustado de la experiencia

– decir que no te ha gustado

– extraer las lecciones de la experiencia

– enfocar las lecciones en cambios en tu conducta a largo plazo

– entender como estas tu configurado por dentro, para saber que creencias son las que debes cambiar

– encontrar los errores que podrías haber solucionado

Ejemplo de REFLEXIONES EN BRUTO:

Me siento bien con:

– Haber experimentado un restaurante de lujo, mi estándar debería ser ir a restaurantes de lujo. El trato servicial, las vistas, la cantidad  de trabajadores, la estética, incluso la comida, todo eso era bueno. (Lo único que no gusto fue el precio, y la música, por lo que no se podía hablar). Lo de la musica no lo íbamos a saber, y los precios de internet eran otros.

Me siento mal con: 

– Fui con mi novia y mi padrastro. No siento que disfrutaran la experiencia: sentían que era caro, que no valía la pena… y que además la música estaba muy alta, así que no se podía hablar. No era tampoco su estilo, querían algo más normal. Debería haber pensado mejor que les gustaría, incluirlos más en la toma de la decisión. 

A partir de ahora APRENDIZAJES DE LA REFLEXIÓN: 

– Incluiré a las personas en la toma de decisión. Serán participes aunque tome yo la decisión final. 

– A partir de ahora, trabajaré para poder convertir restaurantes de lujo en mi normalidad. 

– Entender que a veces, llegas allí y no era lo que estabas buscando. Que puedes hacer en esos momentos… lo mas rentable posible. A veces es irte. 

Posiblemente debería haber preguntado, no tener vergüenza, e irte del lugar si al final no os gusta. Debes llegar hasta donde debes llegar… pero a mi no me gusta decir que NO cuando ya has llegado a cierto punto en la negociación. (Sesgo de presión social y coste hundido)

Ya te han preparado todo, y ahora irte, se sienten mal, te rechazan, tu quedas mal… esas son mis creencias. Pienso que afecta tu reputación… aquí si existe una distinción real. En el mundo de los negocios, no es correcto avanzar una negociación a prácticamente el cierre, sin intención real de compra. Te puede encasillar como emocional y sin criterio y afectar a que te oferten cosas en el futuro.

Era tarde → las alternativas abiertas y atractivas eran limitadas.

No había plan B → cambiar implicaba improvisar, buscar, desplazarse…

Factor “ya estamos aquí” → el cerebro prioriza minimizar esfuerzo inmediato sobre maximizar disfrute (sesgo de status quo).

Errores detectados (cuidado con los sesgos congnitivos)

– debería haber creado el plan en conjunto con las personas relacionadas

– debería haber tenido varias alternativas a mi alcance, para aumentar velocidad 

– decisión final afectada por varios sesgos cognitivos del cerebro (status quo, presión social, coste hundido)

– no distinguir claramente si el tomar la decisión, iba a afectar al futuro o no

Reflexión final

Toda estas meditaciones, son formas de aprendizaje (muy sinceras con uno mismo), que cambian los actos que darás en el futuro. 

De esta forma, obtuviste lecciones por 200€. Lo cual es MUY barato.